Su cesta de compra esta vacía.
Evita a Eva –representación arquetípica de la feminidad–, era el clamor subyacente en toda educación, práctica social, política, bíblica o religiosa vertida durante muchos siglos sobre la conciencia ciudadana.
En los años 50, a pesar de la dictadura franquista y de la preponderancia e influencia total de la Iglesia en el ámbito de la educación, surge una generación que, entre tropiezos, utopías e ilusiones, no exenta de delirios va cavando los cimientos de otra nueva forma más vital y esperanzadora de entender la vida que dará paso al Mayo francés y a la teología de la liberación que puso en aprietos tanto al poder político como al eclesiástico.